En los servidores de nombres está la información que necesita toda llamada, consulta o 'query' en internet: donde reside un dominio, ¿que servidor responde por ese dominio? y su dirección IP.
Cuando se editan los servidores de nombres de un dominio (como se hace cuando se cambia de alojamiento), estos deben refrescarse en todos los servidores de nombres NS del mundo.
Debido al gran número de llamadas que recibe el sistema DNS, este tiene una arquitectura distribuida, de modo que se pueda consultar a la copia más cercana en lugar de consultar a un sistema central.
La caché de los servidores de nombres, tiene que expirar antes de recibir la nueva información. Esté tiempo de refresco es diferente en cada uno porque lo determina el administrador de cada servidor.
El proceso de propagación de los NS o Servidores de nombres dura aproximadamente 24 horas, aunque en algunas zonas geográficas puede tardar 72h o más.
Cuando todavia no han pasado esas 24h (aprox) y los nuevos NS todavia no se han propagado, ocurre que: en los alojamientos nuevos, la web simplemente no funcionará y en alojamientos que cambian de sitio, estariamos viendo o trabajando con el alojamiento antiguo ( siempre y cuando el alojamiento antiguo siga ahí y no haya sido eliminado ).
Lo mismo pasa con el correo. Entrará en el servidor antiguo mientras no se propague, incluso podrá entrar al servidor nuevo el que proviene de algunas zonas geográficas mientras que el que viene de otras zonas, podría estar entrando en el servidor antiguo.
Los períodos mínimos de refresco y el período de inestabilidad (entre 24h y 72h) deben ser tenidos en cuenta al editar los servidores de nombres de un dominio.
Lo ideal sería tener los servicios duplicados en el servidor antiguo y en el nuevo, durante todo el período de inestabilidad.
Al finalizar el período de inestabilidad y antes de dar de baja el servidor antiguo, comprobar que no haya quedado algún mensaje u otra información perdida.
